jueves, 26 de julio de 2012

Horizonte





Atisbado, presentido, el horizonte apenas vislumbrado

interrumpido por el quicio

por la geometría exasperante de la alcoba

por la quietud cerrada del cuerpo

por la superficial des inquietud de la actitud

Ácido el verde que agobia la estancia,

 estrechándola hacia dentro

hacia un lecho gélido de blanco des conyugal

La mirada perdida, como si el horizonte no le compitiera

Como si lo de fuera no le perteneciera

Dejándola a solas con esa inquietante serenidad

sin horizonte.